Niesztche y los porteros del futbol mexicano en su primer intento de asesinato.

-Abrele wey.
-Perame- la "Tota" Carbajal sabia muy bien el peligro que representaba meterse a la cocina de la casa grande de las nubes, no iba a arriesgar la empresa por la prisa de un argentino barato.
-¿En cuanto tiempo regresa san Melquiades?
-En media hora, tu tranquilo que yo cuido aqui la puerta.- Era el "Gato" Marin que habia encontrado a Niesztche dos dias antes de que se dejara convencer por este par de locos de realmente matar a Dios.

El plan era este: Carbajal entraria a la cocina junto con el argentino y buscaria la salsa verde de san Melquiades, ya Dios los habia invitado a comer a su mesa y habian visto la adicción el Señor por ese aditivo alimenticio. Niezstche consiguió de unos traficantes un poco de veneno que haria el resto. El único inconveniente era san Melquiades, un papa del siglo II que estaba encargado de preparar la comida del altisimo.


-¿Sabes algo de ese Niezstche?
-Creo que era un filósofo*, nunca lo leí la verdad. Igual, eso aqui no vale nada- se refería claramente a la imposibilidad de encontrar una verdad absoluta.
-Es que es imposible encontrar una verdad absoluta- eso solo confirma lo que acabo de decir.
-El problema aqui en el cielo es que ya nadie cree en Dios, ya no hay religion aqui ya todos lo conocen.
-No por mucho tiempo.
-Bua-ja-ja-ja-ja- rieron malevolamente durante un rato.

Melquiades nunca llegó, ya sólo quedaba esperar...

Al otro dia el par de porteros y Niezstche charlaban en un parque cuando los interrumpió un gran trueno en el cielo. El sonoro clamor vino acompañado de la apertura de los cielos. En diez caballos blancos venian diez jinetes con altavoces que en estrepitosa carrera y ensordecedor grito clamaban: "El sagrado asistente ha muerto, ha sido envenenado, pena y llanto, Gabriel ha muerto".

No contaban con que Dios, un ser tan poderoso, tuviera la previsión de hacer que un súbdito probara sus alimentos antes que Él.


*tengo que confesar que soy muy irresponsable al escribir sobre Niezstche sin haberlo siquiera leido, pero espero se perdone esta falta por el caracter poco serio del relato.

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